El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, en funciones, ha publicado en el BOE el pasado día 23 de diciembre de 2015, un Real Decreto sobre Prescripción Enfermera no consensuado y a espaldas de nuestra Comunidad Autónoma. El texto final dado al Artículo 3, supone un retroceso humillante para el profesional de la enfermería, por presiones del sector más ultraconservador médico. Abocará para satisfacción de los sectores privatizadores y contrarios a la sanidad pública, a un colapso del Sistema Nacional de Salud, una pérdida alarmante de calidad asistencial y graves perjuicios al funcionamiento normal de la atención sanitaria. Los enfermeros y enfermeras a partir de ahora, no deberán usar ni indicar ningún medicamento sujeto a prescripción médica, si antes no tienen la prescripción del médico. No pueden adoptar ni una sola decisión respecto a dichos fármacos, obligando a que el paciente pase previamente siempre por el médico que deberá realizar un diagnóstico, determinar la prescripción y elegir el protocolo a seguir. Se rompe de esta manera la actuación autónoma del profesional de la enfermería, con total inseguridad jurídica por la posibilidad de incurrir en un delito de intrusismo.

Se vuelve al arcaico y antidemocrático sistema de supeditación al médico, al realizar las tareas que éste le asigna, teniendo en cuenta solo las cuestiones técnicas, y no la dimensión humana de la profesión que es la faceta más valorada. Se rompe con el trabajo multidisciplinar y se vuelve al de subordinación.

Esta agresión requiere unidad de acción en el Sistema Nacional de Salud, con el objetivo de parar este dislate. 

PUEDE CONSULTAR AQUÍ EL REAL DECRETO 954/2015